El bosque galería de Ahuehuetes es un mar en el cual convergen cientos de almas, persistentes, resistentes, bajo un conglomerado de espejos del alma para la mirada certera; refugio de ideas e identidades que solo son apreciables dentro de la individualidad, y tras la búsqueda, dentro del ahuehuete nos podemos encontrar con uno mismo.
Estos seres tienen distintos rasgos, aspectos, que, dentro de todo el oleaje de ahuehuetes, se hacen diferenciar uno de otro, porciones de identidad compartida, trozos de intimidad esperando a ser descubierta tras el paso del tiempo.
Entre marejadas se dispersa el pensamiento, se fragmentan realidades, se transforman en mentiras y verdades, que solo quien observa con el corazón en el ojo, podrá ver. Entre mil y una ola se encuentra a uno mismo, una mirada ajena a una realidad conocida, una dura piel de madera que aguarda gentil y paciente.
S.T / 2020 / Fotografía digital
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